CYL-HUELGA GENERAL
Pancartas, petardos y proclamas en la noche de huelga en Valladolid
29/03/2012 - 09:33
Valladolid, 29 mar (EFE).- Las pancartas, los petardos, las proclamas y los gritos de "huelga general" acapararon el protagonismo de la actuación de los piquetes durante la noche en Valladolid, en la que participaron los líderes sindicales de CC.OO y UGT en Castilla y León, Ángel Hernández y Agustín Prieto, respectivamente.
Fue la fábrica de Michelín el lugar elegido por los grupos de sindicalistas para arrancar la convocatoria de paro general.
"Resistencia pasiva, no somos agresivos pero vamos a informar a la gente", gritó Prieto poco antes de las 22:00 horas ante la factoría, donde se sentó en el suelo junto a un grupo de sindicalistas que secundaron su iniciativa.
Poco antes Prieto alentó a los piquetes a hacer "ronda por todas partes" en una noche que deseó que fuera "tranquila", sin violencia, "con resistencia pasiva".
Así transcurrió la mayor parte de las horas nocturnas en la capital vallisoletana, donde sí se registró una detención, la del miembro de un piquete, al parecer vinculado con CGT, en los accesos a la factoría de Michelín sobre las 5,45 horas, como supuesto autor de amenazas y agresión a una unidad policial de intervención, según explicaron fuentes de la Delegación del Gobierno.
También los agentes intervinieron en Michelín al solicitar la documentación al secretario regional de MCA de UGT, Pedro Hojas, quien en ese momento no portaba el Documento Nacional de Identidad, incidente que quedó aclarado cuando los agentes pudieron certificar su identidad, según explicaron a Efe fuentes sindicales.
Tras esa primera parada en la factoría de Michelín, los piquetes continuaron su recorrido por los polígonos industriales de la ciudad, mientras tiraban petardos, agitaban banderas de sus respectivos sindicatos y coreaban gritos de "huelga general".
Otra empresa de automoción, en este caso carrocerías y montajes de Renault, fue el objetivo de un piquete que acudió a las puertas de la factoría de madrugada, en torno a las 5:00 horas.
Allí, los integrantes del piquete actuaron parando a los vehículos que llegaban al centro de trabajo, mientras agentes del Cuerpo Nacional de Policía trabajaban para que tanto los empleados que acudían como los sindicalistas que se encontraban en esa zona desempeñaran su función.
Algún conductor escuchó las explicaciones de los miembros del piquete sobre las razones para hacer huelga y decidió darse la vuelta sin entrar a la fábrica, la mayor parte enseñó el escrito que acreditaba como "servicios mínimos", y otros siguieron su camino hasta el interior del recinto.
En una ocasión, uno de los conductores optó por no escuchar a los miembros del piquete y continuar su camino en el coche hacia la fábrica, ante las protestas de los sindicalistas que se quejaban de que hubiera podido atropellarles.
En torno a esa hora, poco después, un piquete integrado por más de doscientas personas, entre ellas los representantes de UGT y CC.OO en Castilla y León, se apostó a las puertas de la sede de Auvasa, la empresa de autobuses urbanos de Valladolid.
Miembros del Cuerpo Nacional de Policía, apoyados por la Policía Local, se ocuparon de que los sindicalistas se situaran sólo en una parte, a la entrada de las instalaciones, mientras los agentes formaban un pasillo para facilitar el paso de los autobuses.
Poco a poco fueron partiendo los vehículos fijados para los servicios mínimos en la ciudad, primero los dirigidos a los polígonos y después los destinados a cubrir las líneas urbanas.
"La fuerza del obrero: la solidaridad", "Vergüenza me daría trabajar en este día" y el grito más repetido de la noche, "huelga general", fueron algunas de las frases que gritó el piquete, junto a algunos insultos, la palabra "esquirol" y el ruido de petardos.
Finalmente todos los autobuses que estaba previsto que partieran de la nave en la que permanecen por las noches pudieron salir del recinto para dirigirse a sus destinos, una tarea que acabó pasadas las 7:00 horas y que fue custodiada en todo momento por la Policía.
Los piquetes abandonaron las puertas de la sede de los autobuses urbanos tras la salida de los vehículos, para centrar sus objetivos en el sector servicios, en el comercio y la hostelería, junto a otros colectivos en la ciudad.
